Pilates y alimentación: potenciar tus resultados

Hay muchas cuestiones que influyen en que la práctica de deporte sea más efectiva. Es importante tenerlas en cuenta para mejorar. En las siguientes líneas te mostramos una de ellas, descubrirás que para potenciar tus resultados debes combinar bien pilates y alimentación.

¿Por qué pilates y alimentación forman una pareja inseparable?

Pilates y alimentación están relacionados de forma estrecha. Piensa que se trata de un ejercicio que busca equilibrar el cuerpo a todos los niveles. Algo a lo que contribuye tu forma de comer. No vamos a darte una dieta saludable, sino que vamos a centrarnos en lo que puedes hacer para mejorar la pareja que mencionamos al principio:

• Contar con energía. Para tener la energía que necesitas para practicar pilates debes llevar una alimentación equilibrada. Para conseguirlo, debe ser rica en carbohidratos, proteínas, vitaminas, minerales y grasas saludables. Así estarás listo para realizar tu deporte favorito.
• Una buena digestión. Te recomendamos no hacer pilates ni ningún otro deporte justo después de comer. Además, si quieres tener una buena digestión es bueno que comas la cantidad adecuada de alimentos y que no sean pesados. No te olvides de la fibra para favorecer el tránsito intestinal.
• Hidrátate con frecuencia. No solo debes beber mínimo dos litros de agua al día, también te recomendamos que vayas a tus clases con una botella de agua para mantener una buena hidratación. La sesión será más agradable y evitarás sentirte cansado después.
• Alimentos nutritivos. Aunque ya hemos mencionado algo al respecto, queremos hacer hincapié en que tu alimentación debe ser sana, variada y equilibrada. Por eso, come todo lo que sea saludable y no te olvides ni de la fruta ni de la verdura.
• Di adiós a los alimentos procesados. No consumas alimentos procesados, ya que no te aportan demasiados nutrientes y sí grasas saturadas.
• Aunque dijimos que no íbamos a hablar de dietas, en algunos casos pueden ser beneficiosas para la práctica deportiva. En cualquier caso, hazlo siempre bajo supervisión médica.
• Qué comer antes y después del ejercicio. Antes de practicar pilates debes tomar alimentos que te den la energía que necesitas. Por ejemplo, plátanos o frutos secos. Intenta que sea al menos una hora antes de empezar, como decíamos antes no es bueno que estés en plena digestión. Después de la sesión consume alimentos que te aporten carbohidratos y proteínas. De esta forma, tu recuperación muscular será más rápida.

Pilates y alimentación son una combinación clave para obtener los mejores resultados. Pon en práctica todos estos consejos y disfrutarás de una excelente forma física.